#Rusia2018xCR
Ali Daei, sos el próximo
Fue un partido complicado y hasta por momentos bastante incomodo. Sin embargo, el cabezazo de Cristiano Ronaldo, cuatro minutos después de iniciado el cotejo, fue suficiente para que Portugal logre un triunfo y se mentalizase con conseguir un pasaje a los octavos de final de la Copa del Mundo. Es cierto que el elenco africano pecó de ingenuo y de ineficaz en el ataque, lo que ayudó a los de Fernando Santos a aferrarse a los tres puntos. No obstante, más allá del triunfo luso, la noticia vuelve a pasar por Cristiano y su versión killer: marcó de nuevo, anotó los cuatro goles que lleva su país y es el artillero del Mundial. Pero además de todos estos laureles momentáneos, CR7 llegó a 85 goles y se transformó en el máximo goleador europeo a nivel selección, desplazando a Ferenc Puskas al segundo lugar. La corta estadía del portugués en suelo ruso parece destinada a los libros de historia de los mundiales. Ya en el debut contra España, se metió en la lista de los jugadores que marcaron un hat-trick en el primer partido, acompañando a Pelé, Uwe Seeler y Miroslav Klose. Ahora superó a uno de los mejores delanteros de todos los tiempos.
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El astro del Real Madrid de los ’50, que también supo defender la camiseta de España en el Mundial de Chile ’62, marcó 84 goles con Hungría y fue pieza fundamental de la conquista de la medalla dorada de los Juegos Olímpicos de Helsinki ’52 y el subcampeonato mundial dos años después. Quizás este sea el agujero negro en la carrera de Pancho, quien con el «Equipo Dorado» eran los favoritos al cetro, pero llegó algo diezmado desde lo físico y «el milagro de Berna» puso punto final al sueño húngaro. Volviendo a lo numérico, cabe destacar que Puskas marcó las 84 dianas en 85 partidos. Siendo minuciosos, y hasta un poquito egoístas, ahí esta la diferencia entre las dos glorias de la «Casa Blanca»: mientras el «cañoncito pum» tiene promedio de casi un gol por partido, el oriundo de Funchal los festejó repartidos en 152 encuentros, un promedio de 0.56%.
Haciendo hincapié en la carrera de Ronaldo en la absoluta, tuvo su presentación el 20 de Agosto del 2003, en un amistoso contra Kazajistán. El estadio municipal de Chaves fue el escenario donde vio sus primeros minutos, cuando ingresó por Luis Figo. En partidos oficiales, su debut fue en la primera fecha de la Eurocopa 2004, en la derrota contra Grecia. El por entonces jugador del Manchester United entró por Simao Sabrosa y anotó el descuento.
Quince años después, días más días menos, el portugués ya es el jugador que más veces vistió la camiseta lusa y más goles gritó, relegando a Figo y Pauleta respectivamente, y ahora va a en busca de dos récords más: el primero, y más cercano, es superar a Eusebio como el futbolista lusitano con más goles en mundiales -los nueve que hizo en Inglaterra ’66 contra los siete desde Alemania 2006- y el segundo, más lejos pero no imposible, es doblegar los 109 goles del iraní Ali Daei, el «campeón reinante» de la marca como goleador en selecciones a nivel global.
El actual Mundial ha sido la escenografía ideal para Cristiano Ronaldo, una forma de reivindicarse contra aquellos que lo colocan por debajo de Lionel Messi. En gusto no hay nada dicho, lo único cierto es que el Bicho ya hizo suficiente para ser considerado como uno de los mejores de todos los tiempos.
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- AUTOR
- Claudio González
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