Estados Unidos fue una de las revelaciones de la fase de grupos del Mundial y enfrentará a Países Bajos en octavos de final. Con un estilo de juego atractivo en el que se destacan sus extremos Christian Pulisic y Timothy Weah -los autores de los dos goles de su equipo-, resulta imposible no destacar a sus mediocampistas Weston McKennie, Tyler Adams y Yunus Musah y a sus laterales Sergiño Dest y Antonee Robinson. De características ofensivas, estos últimos le aportan profundidad a cada ataque de USA.

Robinson nació en Milton Keynes, a 72 kilómetros al noroeste de Londres, y de chico se mudó a Liverpool. Jamás vivió en Estados Unidos, aunque tiene la nacionalidad debido a que su padre Marlon, también inglés, consiguió la ciudadanía estadounidense al pasar toda su infancia en Nueva York. Con 11 años llegó a las juveniles de Everton y en 2013, con 16, firmó su primer contrato profesional con los Toffees. Allí no pudo debutar en la Premier League, pero el buen nivel mostrado en distintas cesiones en el Championship (2017/2018 en Bolton y las dos temporadas siguientes en Wigan) hizo que varios clubes se fijaran en él.

El recién ascendido Fulham lo pagó 2 millones de libras en agosto de 2020 y, promediando la campaña, se hizo un lugar en el once inicial. Pese al descenso, continuó en los Cottagers y solo se ausentó en cinco partidos en el torneo que Fulham ganó con 90 puntos para regresar rápidamente a la Premier. A su vez, integró el equipo de la temporada en la 2021/2022 del Championship.

“Me resulta raro que me digan Antonee. Prefiero que me digan Jedi y respondo más a eso”, declaró en una entrevista en The Guardian. Gracias a su fanatismo por Star Wars, fue él mismo quien se puso ese apodo de niño y les comunicó a sus familiares que prefería que lo llamaran así.

Cuando Estados Unidos no clasificó a Rusia 2018, se llevó adelante una renovación en los nombres y un rejuvenecimiento del plantel con vistas al Mundial 2026, donde será local. Robinson ya había sido parte de la sub-17 yankee, pero en marzo de 2018 tuvo que decidir si aceptaba un llamado a la mayor o a la sub-21 de su país natal. Finalmente, se decantó por Estados Unidos y debutó en un triunfo por 3-0 ante Bolivia en un amistoso, en el que asistió a Weah en el tercer gol. Desde ese momento, ya lleva disputados 32 partidos en el USMNT -24 en los últimos dos años- y dos goles convertidos por Eliminatorias contra Honduras y El Salvador.

Clave para Marco Silva en el Oeste de Londres y para Gregg Berhalter en el combinado estadounidense, Antonee Robinson cerrará en Qatar el mejor año de su carrera profesional. En las últimas horas, se hizo viral un video suyo abrazando al lateral derecho iraní Ramin Rezaeian, quien lloraba desconsoladamente post eliminación.

Con un acento scouser -tal como se conoce a la tonada de los de Liverpool- que llama la atención de sus compañeros de Selección y la inteligencia de un Jedi, sabe cuándo lastimar con pelota dominada y cuándo aprovechar su notoria velocidad (es de los más rápidos de la Copa del Mundo) para picar al espacio. Antonee Robinson es otro futbolista que está aprovechando la máxima cita para aumentar su valor de mercado.