Copas europeas
Borussia Dortmund, con la intención de volver a las grandes noches
La temporada europea ha dado inicio a procesos interesantes en clubes de élite, con nuevos entrenadores y la posibilidad de depositarse en los primeros escalones del continente. Es el caso del Borussia Dortmund, flamante campeón de la Copa de Alemania, que estrena algunas incorporaciones y sobre todo tiene una cara nueva en el banco de suplentes como la del holandés Peter Bosz, actual técnico subcampeón de la Europa League con Ajax.
En los años anteriores, de la mano de Jürgen Klopp y Thomas Tuchel, el club alemán demostró que a pesar de ser un equipo que manejaba un presupuesto menor en relación a los gigantes europeos, había logrado ubicarse como uno de los conjuntos más reconocidos. Para el comienzo de esta temporada, apuntó a la vuelta de figuras, como Mario Götze y el aún lesionado Marco Reus, más la expectativa de lo que puedan hacer jóvenes jugadores de la talla de Maximilian Phillip o Christian Pulisic.
Pero la historia dorada del Dortmund en la Champions League tuvo su pico más alto en la final de la temporada 1996-1997, consagrándose campeón luego de vencer a Juventus, que tenía un equipo con futbolistas de renombre internacional como Didier Deschamps y Zinedine Zidane, sumados al joven talento de Alessandro Del Piero. Aquella tarde en el Olímpico de Munich, se consagró Karl- Heinz Riedle convirtiendo dos goles, además del logrado por Lars Ricken para coronar al conjunto dirigido por Ottmar Hitzfeld con el máximo galardón europeo.
Otro de los momentos en los que el Borussia estuvo cerca de ganar la competición fue hace pocos años, en la final del 2013, cuando el equipo comandado por Klopp cayó en Wembley frente a su clásico rival, Bayern Munich, luego de transformarse en el equipo sensación de la competición. En aquella edición, destacó sobremanera el tridente ofensivo conformado por Mario Götze, Marco Reus y Robert Lewandowski.
Dortmund se había dado el lujo de golear al Real Madrid y de dejarlo fuera de la etapa decisiva, con un descollante Lewandowski que marcó cuatro goles y un eléctrico Reus, indescifrable para la defensa Merengue. La final de esa temporada fue atípica porque se enfrentaban los dos equipos más grandes de Alemania, pero en la previa a la definición una de las figuras del Dortmund, Götze, fue vendido al Bayern para el siguiente curso, aunque una lesión le impidió al ’10’ jugar. El jugador fue repudiado por el público, que llegó a quemar un cajón con camisetas de quien hasta el momento era uno de los emblemas.
Si hay que trazar un paralelismo entre los mejores momentos del Dortmund en el máximo certamen europeo, es inevitable destacar que sus equipos se conforman con jugadores menos valiosos que los de clubes mas grandes y con mayor presupuesto, pero siempre es un equipo que merece respeto en el certamen. De hecho, en el último tiempo los muniqueses se han nutrido de futbolistas que llegaron sin muchos pergaminos a Westfalia y luego recalaron en Baviera en calidad de estrellas, por ejemplo el antes mencionado caso de Götze o Lewandowski y Mats Hummels. También, es menester añadir la polémica salida de Ousmane Dembelé a Barcelona.
El nuevo técnico, Peter Bosz, se destacó en el último tiempo en Ajax por el buen trato de pelota, pero además por apostar a un esquema con extremos rápidos, utilizar las bandas sumando a los laterales y jugar con interiores que no resignan intensidad en la marca y a su vez saben trasladar el balón y generar juego.
Una de las mayores coincidencias entre el actual DT y el saliente, Tuchel, es el sistema de juego, los dos ponderan sobre los demás esquemas el 4-3-3, más allá de que entre ambos hay diferencias. Igualmente, la dinámica es un factor fundamental en ambos casos. La suerte no favoreció en el sorteo a los alemanes, porque deberán cruzarse con Real Madrid nuevamente, además de remontar la caída reciente frente a Tottenham Hotspurs por 3-1.
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