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Deportes Temuco, un club de uniones y progresos
El equipo Deportes Temuco tuvo varios cambios de nombre a lo largo de su historia. Fundado el 27 de junio de 1916, en la década del ’60 el club se fusionó con el Green Cross, de Santiago, y comenzó a llamarse Green Cross-Temuco. Pero también pasó por Green Cross-Cautin, Deportivo Temuco, entre otros, hasta finalmente como se lo conoce hoy.
¿Por qué se produjo esta unión entre dos clubes? Green Cross sufrió una tragedia que causó una enorme crisis en la institución. En abril de 1961, el avión que trasladaba tanto a los futbolistas como al cuerpo técnico, se estrelló y fallecieron todos los tripulantes a bordo. Este accidente produjo grandes problemas económicos y la consecuencia inmediata fue el descenso a la Primera B del fútbol chileno. Finalmente, unos años después, el club se mudó de Santiago a Temuco y en aquel momento es cuando surgió la fusión –que actualmente se mantiene–. Los colores que representaban a Green Cross eran el blanco y el verde, por eso la camiseta actualmente también lleva ese tinte.
Deportes Temuco no es un club grande como lo son Colo Colo, Universidad de Chile o la Católica, pero sí se lo reconoce como una institución con historia. No obstante, una década atrás, vivió uno de sus momentos más duros. En 2005 le tocó descender de la Primera División al campeonato de Primera B. Una de las grandes razones, de esta crisis, se debió a deudas tanto con los futbolistas como con el cuerpo técnico. Con la intención de frenar la hemorragia, Temuco se transformó en una Sociedad Anónima Deportiva pero, lejos de solucionar los problemas, estos empeoraron. A la siguiente temporada, Temuco cayó a la Tercera División de Chile (campeonato amateur), por primera vez en su historia.
La institución siguió teniendo problemas económicos y, durante cuatro años, no pudo jugar profesionalmente, hasta que regresó a la Segunda División en 2012. Y cuando todo parecía encaminarse a un mundo mejor, al meterse en la liguilla para el ascenso a la Primera, surgió una nueva complicación: la ANFP (Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile) no le permitió jugarla por deudas.
Otro de los equipos de la ciudad de Temuco fue Unión Temuco, fundado el 30 de enero de 2008. Dicha institución, que militaba en la Primera B, contaba con una estabilidad financiera pero, al ser un club relativamente nuevo, carecía de hinchas y tampoco tenía la popularidad del conjunto más importante de la Araucanía. Entonces, Esteban Marchant y Marcelo Salas, presidentes de Deportes Temuco y de Unión Temuco respectivamente, decidieron fusionarse, y el histórico delantero chileno pasó a ser el máximo dirigente del conjunto con más caudal de gente de la ciudad.
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Con esta unión, realizada en 2013, Deportes Temuco ocupó la plaza del ya extinto club en la Primera B y, de a poco, fue saneándose tanto del lado institucional como del económico. Los fanáticos tuvieron que esperar dos años más para el ascenso a la máxima categoría del fútbol chileno, luego de que el equipo saliera campeón en 2015. El entrenador en aquella campaña fue Luis Landeros, quien había trabajado con Jorge Sampaoli en la Universidad de Chile.
Ya en el más alto nivel nacional, en la primera temporada Temuco supo mantenerse para no volver a descender. Landeros, en ese momento, decidió renunciar, y el que lo reemplazó fue el argentino Dalcio Giovagnoli, de pasado por varios equipos en el ascenso de su país de nacimiento y campeón con Cobresal. Durante su segundo año en la Primera División, el club logró algo inédito para la institución: consiguió clasificar, por primera vez en su historia, a un campeonato internacional. El sexto puesto en la tabla general le dio la posibilidad de disputar la Copa Sudamericana. Giovagnoli dejó el cargo en junio de este año por malos resultados y el que lo sucedió fue Miguel Ponce, entrenador chileno, que lo dirigió en la polémica serie jugada frente a San Lorenzo. Actualmente, Deportes Temuco se encuentra 13° en la tabla de posiciones, a cuatro puntos de la zona de descenso.
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