La generación actual de los chicos que ven fútbol recordará por años al jugador surcoreano del Tottenham “Sonny” o “Sonaldo”; como se lo apodo en la play; mejor conocido como Heung-Min Son para los que ya pasaron esa etapa. Estos últimos recordarán con más detalle al mítico Ji-Sung Park, emblema de uno de los mejores equipos del Manchester United. Y, Algunos más grandes sabrán que cuando les nombre a Cha Bum-Kun, será sinónimo de goleador y uno de los mejores jugadores que ha dado Corea del Sur a lo largo de su historia.

Algunos jugadores quedarán en la memoria de sus equipos y sus naciones, Bum-Kun quedó en la historia de Corea del Sur, donde fue convocado por su país desde 1972 a 1979, y regresó para disputar el Mundial de 1986, pero no solo fue un jugador más, es el futbolista que más veces vistió la camiseta de su Selección y el que más goles marcó. Aunque no es el único que idolatran hasta el día de hoy. Hay una ciudad que lo venera y está ubicada en Renania del Norte-Westfalia, es Leverkusen y su equipo es el del entrenador de moda al día de hoy, Xavi Alonso, sí, estamos hablando del Bayer Leverkusen, adivinaron.

Cha Bum-Kun brilló con la del Leverkusen.

Pero ¿por qué es tan querido Bum-Kun en ese equipo? Ya lo responderemos para los más jóvenes, los grandes ya lo saben seguramente. Vayamos por partes, arranquemos por su inicio. ¿Cómo en esa época un coreano llegó a Alemania para hacer historia? “Cha-Boom” como se lo apodó en el mundo del fútbol, arrancó a jugar en clubes semi-profesionales, destacó al ganar títulos universitarios y para 1976 lo contrató el equipo de la empresa Trust Bank, pero tuvo que abandonarlo para cumplir con el servicio militar obligatorio. Durante los siguiente tres años fue parte de las Fuerzas Aéreas de corea, pero jamás dejó a la pelota, consiguió seguir ligada a ella en el equipo del ejercito aéreo.

Si bien el fútbol en el país asiático era amateur, siempre tuvo una Selección y Bum-Kun era parte de ella. Todos los años se disputaba la Copa del Presidente, jugaba la selección surcoreana ante varios equipos invitados. En 1978 el Eintracht Frankfurt, invitado al torneo, tras disputar un partido contra Corea del Sur quedó asombrado deñ juego de Cha Bum-Kun y lo quería fichar, pero no tenía cupo de extranjero, por lo cual el SV Darmstadt 98, rival en la Bundesliga, lo contrató por seis meses. Esta firma lo convirtió en el segundo jugador asiático en vestir los colores de un club europeo, tras Yasuhiko Okudera, otro día podríamos hablar de él.

Finalizados los Juegos Asiáticos de 1978, Cha Boom se marchó a Alemania, pero no fue tan sencillo porque el Ejercito Surcoreano reclamó su vuelta, le faltaba cumplir un año más de servicio, por lo cual solo pudo disputar un encuentro. Pero no todas son malas noticias, tras ese año el Frankfurt liberó un cupo de extranjeros y se confirmó el fichaje.

Cha Bum-Kun con al casaca de su Selección.

A pesar de llegar como un completo desconocido para los hinchas, se ganó un lugar en el 11 inicial gracias a su cuota goleadora, y su nombre pasó a ser uno de los más ovacionados. En esta etapa con el equipo alemán levantó la Copa de la UEFA (78-79) y ese mismo año fue elegido como uno de los mejores de la liga. Al siguiente año obtuvo la Copa de la liga y fue el máximo goleador del club por tres años seguidos. Estos números lograron que Bayer Leverkusen pusiera los ojos en él.

El conjunto de la farmacéutica lo compró, y si bien acá el asiático siguió rompiendo redes, había algo que le faltaría desde su arribo a Europa. Cha Bum al irse a jugar a Alemania renunció a cualquier llamado de su Selección, no porque él quisiera, así eran las normas en su país. En Leverkusen vivió seis años, y en el segundo ya fue el máximo goleador del plantel. Pese a lo que comentamos antes sobre su convocatoria a la Selección, el técnico, Kim Jung-nam lo citó para el Mundial de México 1986.

Tras la eliminación en fase de grupos de Corea volvió a Alemania y surgió la leyenda. Se volvió tan querido porque gracias a él el club levanto su primer título: la Copa de la UEFA en la temporada 87-88. El Bayer venció al Espanyol de Barcelona tras una épica remontada, Cha hizo el 3-3 a 10 minutos del final y ganaron por penales.

Con 36 años, el notable goleador decidió ponerle fin a su carrera como futbolista dejando un saldo de 98 goles en 308 partidos, números que lo ubicaron como el máximo goleador extranjero de la Bundesliga hasta ese momento, actualmente es el noveno.

Tras su retiro se dedicó principalmente a su escuela de fútbol, la cual fundó pocos años antes de dejar el deporte profesional. También fue entrenador de equipos surcoreanos como  Hyundai Horangi y el Shenzhen Pingan. Pero se destacó principalmente como técnico de la Selección de Corea del Sur, banco al que llegó para la fase final de las Eliminatorias del Mundial de Francia 1998, donde quedó primero y fue nombrado como el mejor entrenador de la Confederación Asiática. Pero lastimosamente no corrió con la misma suerte en el Mundial, ya que quedaron eliminados en la fase de grupos y lo echaron tras la goleada 0-5 ante Paises Bajos.

Aunque el fútbol siempre da revanchas… y ¿cómo no? el coreano tendría la suya, aunque tardaría en llegar. Para el 2004 se hizo cargo del Suwon Samsung Bluewings y se mantuvo hasta el 2010. En ese periodo el club ganó dos Ligas, dos Copas de Corea, dos Copas de la Liga, una Supercopa y el Campeonato Pan-Pacífico de clubes. Cha Boom quedó lleno goles y títulos, tanto a nivel personal como individual y se alejó del fútbol profesional para ahora sí, dedicarse de una vez por todas a enseñar lo mejor sabe hacer, goles, en su propia escuela de fútbol, Chaboom F.C.