Claudio Piojo López, Cristian Alberto Kily González, Vicente Rodríguez, Juan Mata, David Silva y Jordi Alba. ¿Cuál es el común denominador entre éste grupo de futbolistas? Algún avispado dirá que todos pasaron por el Valencia, y es verdad. Otros serán más puntillosos y dirán que todos fueron (o son, según sea el caso) habilidosos y descarados regateadores, hay verdad en esa aseveración. Alguno más sumará a la lista de características el hecho de que todos son zurdos. Razón concedida. ¿Qué nos trae a la memoria el aglutinamiento de estos jugadores? El «culpable» es un chico con pinta de crack y apenas veinte años en las espaldas.

Gonçalo Guedes juega en la actual temporada para el Valencia, es un hábil y descarado encarador, juega por la izquierda pero… a diferencia de sus antecesores no es zurdo, lo que no precisamente implica un déficit sino todo lo contrario. El portugués suma peligro pues es capaz de cortar hacia el centro y disparar, jugada que en lo que va de la actual temporada está haciendo uno de sus sellos distintivos, si no el que más.

El 7 domina la banda izquierda

El sábado impartió cátedra desde el lado izquierdo de la cancha de Mestalla, ante los eufóricos y fieles hinchas ches, y confirmó un presente ilusionante. Fue indescifrable para la defensa hispalense, que lo padeció con un golazo desde fuera del área (precisamente regateando de la banda al centro) en el primer tiempo que constituyó una goleada escandalosa para el otrora campeón de la Europa League.

Sobre el final, Guedes asistió a Santi Mina para el 3-0 y selló la goleada con un tanto que conjuntó velocidad en la conducción y exquisitez en la definición.

Suspiran en España ante la eventual marcha del extremo portugués, sueñan en Francia con un hipotético engrane en la cada vez más temible máquina llamada Paris Saint-Germain.