El primer paso en el que se acertó desde la Federación colombiana, fue la de hacer volver a Maturana para dirigir a la Selección allá por 1993. Lo primero que se planteó Pacho fue que Argentina y Brasil estaban lejos de todos y que Colombia debía conquistar el tercer lugar de América, para luego sí disputarles los dos primeros lugares a los argentinos y brasileños.

Colombia tenía por delante la Copa América en Ecuador, ese mismo año, y la clasificación para el Mundial de Estados Unidos 1994, por lo tanto, Maturana, tomó la segunda decisión para llevar adelante el proyecto.

Maturana, el hacedor del proyecto

Dejó de lado al goleador Arnoldo Iguarán muy querido por la gente, y le dio protagonismo a jóvenes de la talla de Faustino Asprilla, Adolfo Valencia e Iván René Valenciano. Sacó del arco a René Higuita y puso a Óscar Córdoba después mantuvo la base: Perea, Escobar, Herrera, Leonel Álvarez, Gómez, Rincón, Redín y un tal Carlos Valderrama.

Llegó a la Copa América criticado por haber dejado fuera a los jugadores mencionados y porque aún no se encontraba el fútbol y los resultados deseados. Pero una vez comenzada la competencia, todo cambió para bien.

Debutó venciendo a México por 2-1, con goles de Valencia y Aristizábal; Luego empató con la Bolivia de Marco Etcheverry, 1-1 gol de Orlando Maturana; Y para cerrar, empató 1-1 con Argentina, gol de Freddy Rincón.

Tino Asprilla, el goleador

Como ganador del grupo fue a enfrentarse a Uruguay, iba perdiendo 1-0 con gol de Marcelo Saralegui, pero luego empató Perea y en la definición por penales fue Valencia el que le dio el pase a Semi. En esa instancia, se enfrentó a la Argentina con empate 0-0, ésta vez Aristizábal erró su penal y debió ir a jugar por el 3º y 4º puesto y allí venció a Ecuador por 1-0 con gol del Tren Valencia.

El siguiente paso eran las Eliminatorias, cayó en el grupo con Paraguay, Perú y Argentina. En Colombia se prepararon con todo. Por primera vez se vendieron los derechos televisivos a un solo canal (Caracol) y se fijó como única sede a Barranquilla. La selección pasaba a ser una cuestión seria y nacional.

El debut no fue el esperado: empató de local 0-0 con Paraguay. Luego viajaba a Perú para enfrentar a su padre histórico, y lo venció 1-0 con gol de Rincón y cerró la primera parte, venciendo a la Argentina 2-1 (le cortó una racha de 33 partidos invictos) con goles de Valencia y Valenciano.

Valderrama, el mejor de la historia

En la segunda parte, empató con Paraguay 1-1, venció a Perú 4-0, goleándolo por primera vez en su historia y logrando al menos con éste triunfo, un lugar en el repechaje.

Y llegaba ÉL partido, la peor afrenta (dicen muchos) de la historia del fútbol argentino. Colombia llegaba al Monumental, para prepararse con miras al repechaje, pero jugó su mejor partido de la historia y nos cacheteó el ego venciéndonos (me cuesta ponerlo) 5-0, casi dejándonos fuera del mundial y del repechaje, si Paraguay le hacía un gol más a Perú.

Los goles de Rincón (2), Asprilla (2) y Valencia, clasificaron directamente al Mundial de Estados Unidos a una Colombia que ya veía de para bienes, ya que unos días antes del match ante Argentina, Carlos Vives presentaba su disco «Clásicos de Provincia».

Pero todo tiene un final, todo termina, como reza la canción de Vox Dei, y este triunfo marcó una especie de maldición sobre Colombia que no volvió a ganar. Ya en el Mundial, todas fueron piedras en el camino, los de Pacho Maturana no llegaron de la mejor manera, pero el 5-0 a Argentina le daba cierta chapa.

Cayó en el Grupo A con Estados Unidos, Rumania y Suiza. Comenzó perdiendo con los rumanos por un contundente 3-1, goles de Raducioiu (2) y George Hagi, descontando el Tren Valencia. Luego perdió nuevamente ante USA 2-1, con el recordado y fatal gol de Escobar en contra, Stewart y nuevamente Valencia para Colombia. Cerró su horrible participación venciendo a Suiza por 2-0 con goles de Gavíria y Lozano. Terminó último.

Pero faltaba lo peor, al llegar a Colombia, el Cártel de Medellín mató a Andrés Escobar, culpándolo por la eliminación. El defensor era considerado una de los mejores de América y el Milan lo estaba mirando para llevarlo como reemplazante de Franco Baresi.

Un gran equipo que comenzó muy bien, que hizo los pasos correspondientes. Lamentablemente la historia terminó de manera trágica.