América
Grandes futbolistas chilenos de las últimas décadas
“Por ejemplo, en el Mundial 1962, salimos terceros, pero los triunfos van mostrando quiénes son mejores, y este plantel logró dos títulos”, expresó Elías Figueroa, quizás el mejor jugador de todos los tiempos de Chile. Esta generación de futbolistas chilenos, que ganaron las dos primeras Copas América de su historia, puede ser considerada la más importante de todas. No obstante, en este artículo se hablará, sobre todo, de los jugadores chilenos que, a pesar de no haber conseguido ningún título, marcaron una época a lo largo de sus carreras.
Elías Figueroa (1964-1982)
Considerado uno de los grandes de todos los tiempos en Chile, disputó los Mundiales de 1966, 1974 y 1982, además de ser reconocido como uno de los defensores destacados de la Copa del Mundo, en Alemania, junto con Franz Beckenbauer. Figueroa fue galardonado con numerosos premios individuales, como por ejemplo al ser elegido como el mejor futbolista de América tres veces en 1974, 1975 y 1976. Don Elías, como lo apodaban a él, fue un jugador sobresaliente. Aparte de ser el capitán y la voz del mando de Chile, tenía la agresividad tanto para anticipar como para correr hacia una banda a cortar la jugada, además de la fuerza para ganar en los choques ante los delanteros. No solo eso, sino que contaba con una técnica excelente que le permitía ser la referencia en la iniciación de su equipo, como también para mandarse con conducciones hacia arriba.
Roberto Rojas (1976-1989)
Algunos lo nombran a él y otros a Sergio Livingstone, pero si no es el mejor arquero en la historia de Chile, está cerca. Su carrera se centró en jugar primero para el Colo Colo y después para el San Pablo, y además llegó hasta la final de la Copa América en 1987 (perdió con Uruguay por 0-1). Al no ser del todo alto (1,80 metros), fue un portero muy completo, aunque sus máximas virtudes eran los reflejos, la agilidad y la elasticidad. Varios tiros, que a la vista terminarían en gol, el Cóndor, como lo apodaban, los salvaba gracias a su capacidad para reaccionar a último momento.
Jaime Pizarro (1982-1999)
Uno de los máximos ídolos del Colo Colo. Ganó 14 títulos con el club (entre ellos seis torneos nacionales, una Copa Libertadores y una Recopa Sudamericana), mientras que con Chile salió subcampeón, en la Copa América de 1987, y tercero en la de Chile en 1991. Además, France Football lo galardonó como el mejor mediocentro de 1987. Su lectura, su posicionamiento y su despliegue fueron una parte principal del juego de Pizarro, pero también podía sumarse al ataque porque tenía la capacidad de realizar grandes remates que le permitieron meter varios goles a lo largo de su carrera.
Ivo Basay (1983-1999)
Sus mejores años los disputó en el Necaxa de México, donde logró ganar la Primera División en la temporada 1994-1995 (metió 122 goles en 217 partidos), y posteriormente en el Colo Colo. Además fue partícipe, con su selección, del subcampeonato en la Copa América de 1987, al convertir tres tantos en cuatro encuentros. Basay fue un delantero que mezclaba habilidad con velocidad y agilidad, y también podía pegarle al arco con ambas piernas. El Hueso, como se lo conoce al chileno, consiguió goles de todas las formas posibles; desde fuera del área, gambeteando al arquero, pegándole de primera e incluso de cabeza, a pesar de medir solamente 1,75m.
Iván Zamorano (1984-2003)
Convertir 322 goles a lo largo de trayectoria futbolística no lo hace cualquiera. Hizo 101 tantos en 173 partidos con el Real Madrid, y fue el pichichi de la Liga que su equipo ganó en 1995 con 28 conquistas. El delantero chileno fue la definición de lo que tiene que ser un nueve de área, durante sus 19 años de carrera, en cuanto a potencia, remate y cabezazo. Asimismo, con su selección no fue menos, ya que alcanzó 34 gritos en 70 encuentros y, además, junto al próximo nombrado, lograron una dupla asombrosa con Chile.
Marcelo Salas (1993-2008)
El gran delantero chileno debutó con la Universidad de Chile en 1993 y, tres años después, es decir en 1996, ya había metido 76 goles. Consiguió 16 títulos a lo largo de su carrera, y se convirtió en el máximo anotador en la historia de su selección con 37 tantos –aunque Alexis Sánchez lo igualó y difícilmente no lo supere–. El Matador tenía una gran capacidad goleadora y técnica, pero su juego no se basaba en ser un nueve de área, sino que participaba moviéndose hacia los costados o involucrándose en las jugadas.
David Pizarro (1996-presente)
Es uno de los máximos ídolos del Santiago Wanderers, y también es muy recordado en la capital de Italia por las seis temporadas que estuvo en la Roma. Pizarro tiene 37 años y está cerca del retiro, hoy juega en Universidad de Chile, pero en sus mejores tiempos fue un mediocampista central de calidad, con habilidad en el pase y una pegada muy buena. Quizás le faltó más protagonismo en su selección en comparación a la que tuvo en sus clubes, aunque ganó la Copa América de 2015 con Jorge Sampaoli.
Arturo Vidal (2005-presente)
Comenzó su carrera en Colo Colo, ganando tres títulos, y su carrera siempre fue en ascenso. Primero pasó por el Bayer Leverkusen y luego se fue a la Juventus, en la que ganó numerosos títulos y llegó a la final de la Champions en 2015 (derrota con Barcelona por 1-3). Más tarde fue vendido al Bayern Munich, equipo donde aún se encuentra. Vidal es la definición de mediocampista total; ida y vuelta notable que lo culmina llegando al área para rematar, defensivamente es una garantía y en el pase también. Probablemente una falencia sería que, a veces, se pasa de revoluciones y puede llegar a cometer una falta que signifique la expulsión. Además, fue (y es) parte importante de la mejor generación en la historia de Chile, como la denominó Figueroa.
Alexis Sánchez (2005-presente)
Debutó a los 17 en Cobreloa y estuvo dos años en los Loínos para luego ir al Colo Colo, donde ganó sus dos primeros títulos. El Niño Maravilla, como fue apodado desde sus inicios, logró una carrera acorde a las expectativas que se generaron en él –todavía le queda bastante tiempo dentro de la cancha–. River, Udinese, Barcelona, Arsenal… en todos los lugares donde fue demostró su talento y su capacidad para gambetear rivales. Pero lo logrado con Chile, siendo el mejor futbolista del equipo y logrando las dos primeras Copas América, en la historia de su país, será lo inolvidable. No solo eso, sino que consiguió 37 tantos con su selección y, actualmente, está igualado con Salas en la lista de los máximos goleadores. Obviamente, lo va a terminar superando.
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- Cultura Redonda
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