Es difícil hablar de fútbol cuando el fútbol parece haber quedado de lado después de un mar de polémicas. Expulsiones, penales no cobrados y dudas es lo que dejó el VAR en estos partidos finales de la Copa América. ¿Es justo? Sí, claramente lo es, porque imparte justicia cuando no se observa algo que entra entre las penalidades, pero las incógnitas se acentúan cuando se dan faltas que nadie se observó, pero que sí fueron, y cuando no se dan faltas que más de uno vio.

De esa forma el público se queda con dudas y grita a los cuatro vientos por «conspiraciones». Es lógico, porque el sistema es claro, más allá de quién sabe o quién no sabe cómo funciona. Y eso va sobretodo para los relatores y comentaristas que estuvieron/están transmitiendo esta competencia. Es necesario entender los métodos de uso para luego explicarle al público y más tarde para criticarlos. A nadie le importa si relatan un gol que después no fue, eso es lo de menos porque si hay una penalidad es porque es ilegal, por ende está bien que anulen el gol. Y en estas filas podemos enrolar a los que aducen que «desvirtúa» el alma del deporte, si es así la única que les queda es jugar en la plaza con los amigos porque hay que entender que se pretende hacer algo más justo. Más de una vez el árbol tapa el bosque, una frase hecha y vieja pero vigente.

Más de una vez nos sacamos las dudas.

Del mismo modo podemos caerle a los «detalles» que falta pulir. Bah primero habría que empezar por la nefasta televisación que hubo en todo el certamen, algo que no ayudó a dispersar las incógnitas y en todo caso las agrandó. Se hace imposible entender que a estas alturas un certamen más que centenario como la Copa América no cuente con una emisión al menos decente.  Luego a esto podemos agregarle las muchas repeticiones que no se pudieron apreciar o los cambios de planos en plenos contraataques.

Esto no es menor, ya que si el publico se queda con incertidumbre imaginen los jugadores o aquellos que pagaron una entrada. Cuando decimos «detalles» hablamos de poder escuchar las charlas que se dan entre los árbitros VAR y el árbitro principal o de saber qué están viendo. De esta forma alejamos los fantasmas que siempre rondan en el aire y cualquiera puede comprender de quién es la determinación de cobrar algo o no o en todo caso de las razones por las cuales no se cobró o sí. El rugby, a pesar de sus diferencias deportivas, tiene un sistema similar al VAR, pero que agrega todo esto. Preguntas simples, respuestas simples. Nada de vueltas.

Otras tantas, nos quedamos con más dudas.

Lamentablemente ésta Copa América no será bien recordada. Primero por éstas situaciones que ensucian una competencia de gran relevancia internacional y luego por su bajo nivel de juego. Hay que ser serios: muy pocos conjuntos demostraron estar a la altura, una cuestión lamentable para el fútbol latinoamericano. Qatar y Japón, ambos equipos invitados y uno con un plantel prácticamente de juveniles han demostrado estar un peldaño más arriba que varios equipos Sudamericanos. Ojalá los cambios se han para mejorar y ayudar a esas mejoras, pero así solo se vende un poco más de humo.