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Mercado de pases europeo: Vol. II
El repaso del mercado en la Bundesliga se limitará al equipo dominante, último campeón y, seguramente, futuro campeón, el Bayern Münich, obsceno campeón del fútbol alemán, y se ceñirá, también, al único equipo que podría robarle un campeonato, como quien le roba un pico a una mina en una noche de boliche. Hablamos del Borussia Dortmund, claro. Equipo que, luego de las revoluciones desatadas durante los procesos de Jurgen Klopp y de Thomas Tuchel, apuesta por el holandés Peter Bosz, quien viene de llevar a un joven y talentoso Ajax a la final de la UEFA Europa League. De todas formas, eso no es lo más ponderante para Die Borussen, que, como ya se dijo anteriormente, vendió a Ousmane Dembélé a un necesitado Barcelona en 105 palos. Además juntó más de 40.000.000 de euros con las ventas de Matthias Ginter al Borussia Mönchengladbach, de Sven Bender al Bayer Leverkusen y del colombiano Adrián Ramos al fútbol chino.
¿Qué hizo con todo ese dinero? Adquirió a Andriy Yarmolenko, del Dínamo de Kiev, en 25.000.000 de euros. El muy buen atacante de la Selección de Ucrania tiene 27 años y tendrá su primera experiencia fuera de su país, ofreciéndose como un gran partenaire de Pierre Emerick Aubameyang. Para el mismo puesto, también ha invertido en Maximilian Philipp, delantero de 23 años, el cual viene de una gran temporada en el Freiburg, y que costó 19.000.000 de euros. Otro que firmó, en este caso para reforzar el mediocampo, es el interesante volante alemán Mahmoud Dahoud, vendido por el Gladbach en 11.000.000 de euros. Para reforzar la defensa, han llegado Omer Toprak (defensor central de 28 años, integrante del seleccionado turco, proveniente del Leverkusen, también abonado en 11.000.000 de euros) y Jeremy Toljan (lateral alemán de 23 años, quien puede jugar por ambas bandas, con notable vocación de ataque y que viene de hacer una gran temporada en el Hoffenheim, que lo ¿regaló? por casi 5.000.000 de euros). Y no podemos dejar de mencionar las dos apuestas que ha hecho el Dortmund: se trajo a Dan-Axel Zagadou y a Jadon Sancho. El primero es un marcador central de 18 años, que viene del PSG, mientras que el segundo es un extremo inglés, de 17 años, que llega desde el Manchester City. Ambos proyectos pintan muy bien.
Aunque no tan bien como la temporada que se le viene al Bayern Münich, que, pese a haber sufrido los retiros de Xabi Alonso y de Philipp Lahm, operó rápido y bien. Compró el pase de Kingsley Coman, se trajo a Sebastian Rudy en condición de libre (volante de 27 años, ex Hoffenheim, hombre del seleccionado teutón), adquirió a Serge Gnabry, volante alemán ex Arsenal que fue comprado al Werder Bremen (e inmediatamente prestado al Hoffenheim) y acordó el préstamo por dos años (sin obligación de compra) de James Rodríguez, quien no tenía lugar en el Real Madrid. Sí invirtió en Niklas Süle y en Corentin Tolisso. El primero, marcador central de casi dos metros de altura, de 21 años, internacional absoluto, viene también del Hoffenheim y costó 21.000.000 de euros. El segundo es un jugador versátil (puede jugar de lateral o en el medio, como lo hacía Lahm), de 23 años, que acaba de debutar con la Selección de Francia y fue vendido por el Lyon en casi 40 millones de euros.
Yéndonos a nuestra siempre querida Serie A, si bien carece de toda la crema que supo ostentar entre los ’80 y ’90, el torneo exhibe hoy un fútbol atractivo, con jugadores jóvenes que prometen animar el fútbol europeo por años y jugadores de experiencia con máxima vigencia, que siguen siendo de primerísimo nivel en el plano internacional, más algunos entrenadores que vienen osando romper con el paradigma de juego tradicional del fútbol italiano y que, gracias a esas pequeñas revoluciones, vuelven a posicionar al fútbol tano entre lo más lindos de mirar. Aunque hay que decir que vienen manteniendo esa postura del excesivo tráfico de jugadores entre los clubes, que tanto lo emparenta al torneo de Argentina, entre otras cosas.
Por ejemplo, el Atalanta, equipo que viene de meter un campañón la temporada pasada, se deshizo de 24 jugadores, incorporando 16 nuevas caras, entre las que se encuentra la de José Luis Palomino, lateral ex San Lorenzo, quien viene del Ludogorets búlgaro a cambio de, sí, casi cinco palos euros. O equipos como el Genoa o la Fiorentina, que en los últimos años supieron armar buenos equipos, quedando cada vez menos de aquello. Los genoveses se desligaron de 17 jugadores y trajeron a 13 nuevos, entre los que se hallan Ricardo Centurión y Nicolás Spolli, quien viene de quedar libre del Chievo Verona. Los Viola, por su parte, se desprendieron de 21 futbolistas, llegando 18, reconociendo entre ellos a Germán Pezzella (a préstamo desde el Betis), a Giovanni Simeone (comprado justamente al Genoa en casi 15.000.000 de libras) y los prometedores Rafik Zekhnini (extremo noruego, de 19 años, que fue comprado en poco más de dos palos euro) y Nikola Milenkovic (defensor central de 19 años, internacional serbio, que llegó desde el Partizan a cambio de casi cinco millones de euros). O los recién ascendidos Benevento, que importó a 17 desconocidos y se deshizo de otros 11, y SPAL, que mantuvo la base del equipo que logró el ascenso, a la cual le agregó a 16 jugadores.
Antes de meternos con los verdaderos grandes, veremos los movimientos del Napoli y de la Roma, equipos que vienen siendo animadores de la Serie A, en la medida que la Juventus los deja. El equipo de la capital tiene nuevo director deportivo: Monchi, el cual viene de hacer un trabajo notable en el Sevilla. El español catalizó una profunda renovación, concretando el arribo de 11 jugadores y dejando ir, entre rescisiones, ventas y préstamos, a 17 hombres. Arribaron jugadores para todos los gustos. Para reforzar la defensa llegaron el mexicano Héctor Moreno (del PSV), Rick Karsdorp (Feyenoord) y Aleksandar Kolarov (Manchester City). Además, se adquirieron las fichas de el brasileño Bruno Peres (Torino) y de Federico Fazio (Tottenham). Para jugar en el medio solo han llegado Lorenzo Pellegrini (una de las figuras del Sassuolo y que con 21 años ya ha debutado en la Azzurra) y Maxime Gonalons (del Lyon). Arriba está lo más interesante: además de la llegada a préstamo del francés Gregoire Defrel (pedido por el DT, Eusebio Di Francesco, quien lo aprovechó en Sassuolo), se lograron concretar los pases de dos de los jugadores con mayor proyección del fútbol europeo: Cengiz Under y Patrik Schick. El primero es turco, tiene 20 años, ya es internacional absoluto, tiene muchas cosas de Lionel Messi (todo a escala turca, obviamente) y viene del Istanbul Basaksehir, habiendo costado casi 13 millones de euros. El segundo es checo, tiene 21 años, se dio a conocer en la Sampdoria y llega a préstamo luego de que se cayera su pase a la Juventus, al no poder pasar dos revisiones médicas por cuestiones relativas a la cardiología.
El conjunto dirigido por Maurizio Sarri, por su parte, no se desarmó. Sí se desprendió de varios jugadores, pero ninguno titular. Tampoco trajo a granel. Pero aprovechó para comprar el pase de Nikola Maksimovic, quien era del Torino y que costó casi 25.000.000 de euros, y para quedarse con Roberto Inglese, delantero que viene de un muy buen torneo con el Chievo Verona, por quien se abonaron poco más de 12 millones de euros, siendo dejado por una temporada más en el club veronés. La cara nueva es la del mediapunta argelino, Adam Ounas, de 20 años, quien viene del Bordeaux por más de diez palos euros y será alternativa de Lorenzo Insigne y Dries Mertens.
Juventus, hexacampeón de la Serie A, estuvo bastante activo en este mercado, realizando una limpieza importante en el plantel: entre préstamos, ventas y rescisiones de contrato se fueron 23 jugadores. Llegaron bastantes menos, algunos para ser alternativas, como el uruguayo Rodrigo Bentancur, el arquero polaco Wojciech Szczesny, el joven lateral Mattia De Sciglio (que viene del Milan), Federico Bernardeschi (mediapunta de 23 años, internacional con la Azzurra, quien arribó de la Fiorentina por casi 40 millones de euros) o el defensor alemán Benedikt Howedes, prestado por el Schalke 04. Otro que llega prestado desde Alemania es el atacante brasileño, Douglas Costa, que venía jugando poco en el Bayern Münich. El gran refuerzo para esta temporada es el del volante de la selección francesa, Blaise Matuidi, quien llegó desde el PSG por poco más de 20.000.000 de euros. Además, se aprovechó a adquirir en forma definitiva los pases de Juan Guillermo Cuadrado y de Mehdi Benatia.
El Inter tiene decidido inmiscuirse entre Napoli y Roma como un oponente más para la Vecchia Signora en la carrera por el título. Salieron 34 jugadores, entre los que podemos mencionar a Juan Pablo Carrizo (se fue como agente libre al Monterrey de México), Felipe Melo (también rescindió), Erkin Caner, Marco Andreolli, Gary Medel (pasó al Besiktas de Turquía), entre otros cotillones. Llegaron 18. No hay demasiado renombre, pero hay una clara intención de adaptar un plantel a la idea de juego de Luciano Spalletti. Firmaron Daniele Padelli (arquero ex Torino, que tuvo un paso por el Liverpool y será suplente de Samir Handanovic), el central eslovaco Milan Skriniar (de 22 años, ex Sampdoria, por casi 32 millones de euros), los laterales Dalbert Henrique (brasileño de 23 años, procedente del Nice, y que costó 19.600.000 de euros) y Joao Cancelo (formó parte de un intercambio a préstamo con obligación de compra con el Valencia, que recibió a Geoffrey Kondogbia), el buen volante español Borja Valero (llega desde la Fiorentina con 32 años, por poco más de 5.000.000 de euros), el uruguayo Matías Vecino (también comprado a la Fiore, pero por más de 23.000.000 de euros) y el delantero francés Yann Karamoh, de 19 años, quien viene a préstamo desde el Caen.
El que pateó el tablero es el Milan, que gracias al capital chino trajo a 11 jugadores, gastando más de 170 millones de euros. Además, hizo una buena limpieza del plantel: se fueron 20 jugadores, entre los que están Diego López, Andrea Poli, Keisuke Honda (libres), Leonel Vangioni, Mattia De Sciglio, Juraj Kucka (vendidos), Carlos Bacca, Gianluca Lapadula y M’Baye Niang (cedidos), entre otro personal de relleno. De todas formas, no ha dejado de recurrir del todo a esos jugadores de dudosa calidad, como por ejemplo Fabio Borini (prestado por el Sunderland) y Antonio Donnarumma, hermano mayor de Gianluigi, quien pasó por las inferiores del Rossonero y viene del Asteras Tripolis de Grecia, a cambio de poco menos de 300.000 euros (sospechamos que a modo de cláusula del renovado contrato de su hermano). Además, llegaron cedidos -con obligación de compra, desde el Atalanta- Franck Kessié (volante marfileño todoterreno, de 20 años, del estilo Gennaro Gattusso, pero con más llegada al arco rival) y -desde la Fiorentina- el delantero Nikola Kalinic, quien alternará con una de las grandes apuestas del club: André Silva, joven y promisorio delantero portugués, pagado al Porto en más de 36.000.000 de euros. Para jugar en el medio llegaron Lucas Biglia, quien costó más de 16 palos euro, y el enganche turco Hakan Çalhanoglu, el cual vino del Leverkusen a cambio de 24.000.000 de euros. Finalmente, apuntaremos a la defensa diagramada por Vincenzo Montella, área que más se modificó en este mercado: para jugar en el lateral derecho llegó Andrea Conti (ex Atalanta, de 24 años, costó 23.000.000 de euros y parece ser una versión mejorada de Ignazio Abate); para cubrir el costado opuesto llegó el suizo Ricardo Rodriguez, comprado al Wolfsburg en más de 14 palos euro; para el centro de la zaga llegaron Mateo Musacchio (pagado en 16.000.000 de euros) y Leonardo Bonucci, ex Juventus, quien llegó a cambio de más de 38 millones de euros, en lo que fue uno de los batacazos del mercado europeo.
Para cerrar, enlistaremos a aquellos jugadores argentinos que no han sido mencionados a lo largo del post: Lucas Alario jugará en el Bayer Leverkusen, donde con casi 25 años tendrá su primera experiencia internacional. Otro ex River, Raúl Bobadilla (nacionalizado paraguayo), volverá a quien fuese su primer equipo en la Bundesliga, el Borussia Mönchengladbach, luego de un buen paso por el Augsburg. El Stuttgart, recientemente retornado a primera división, compró a Santiago Ascacíbar, de Estudiantes de La Plata, en casi diez millones de euros. Rodrigo Palacio dejó el Inter y jugará en el Bologna. El Cagliari cedió a Santiago Colombatto al Perugia, de la Serie B. Mariano Izco quedó libre del Chievo Verona y jugará en el Crotone. Lo mismo le ocurrió a Nicolás Burdisso, que no renovó con el Genoa y recaló en el Torino. Leandro Paredes es uno de los tantos argentinos que firmó con el Zenit, que lo pagó casi 22 palos euro a la Roma, club que volvió a prestar a Juan Iturbe, esta vez al Tijuana mexicano. Maxi López continúa su periplo por el fútbol italiano y abandona el Torino para jugar en el Udinese, que desembolsó por él un monto que jamás conoceremos. Quien dejó Udine luego de su paso por Racing es Emanuel Insúa, quien quedó libre y firmó con el Panathinaikos griego. Por último, el Hellas Verona acaba de comprar los pases de los hermanos Franco y Bruno Zuculini, que vienen del Bologna y del Manchester City, respectivamente.
- AUTOR
- Fernando Marino
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