El bicampeonato en la Copa América fue un hito en la historia de Chile pero, a pesar de su «supremacía» continental, no pudo demostrar su poderío y faltó a Rusia 2018. Ese cachetazo hizo que Juan Antonio Pizzi tuviera que dejar su cargo, aunque para el DT argentino hubo una explicación lógica: «Nos vimos ante el reto complicado de mantener la fuerza física de los jugadores en los cuatro últimos partidos clasificatorios del Mundial. Perdimos tres partidos y nos quedamos a solo dos puntos de la clasificación».

Lo cierto es que la Roja metió un faltazo a la cita mundialista y, para un equipo que venía arrasando, fue un baldazo de agua fría en pleno invierno. Sin embargo, y haciendo hincapié en la actualidad, aún mantiene una base sólida de la mejor generación de su historia pero el colombiano Reinaldo Rueda, el elegido para reemplazar a Pizzi, debe amortiguar que sus mejores estrellas no están en el mismo nivel que en el 2016.

¿Podrá Rueda imponer su juego?

El cafetero tiene una amplia e importante trayectoria al mando de varios equipos, aunque su mayor logro fue la obtención de la Copa Libertadores con Atlético Nacional en 2016. Pero más allá de esto, también estuvo al mando de la Selección Colombia, la Selección de Honduras y la Selección de Ecuador. Una trayectoria de casi 30 años y de tratar con varios pesos pesados avalan y le dan espalda para imponer sus normas. En principio, la alineación titular, más allá de los nombres, no debería variar demasiado entre un 4-3-3 y un 4-2-3-1, aunque el retoque es mínimo porque la mayor diferencia es la posición de los extremos, ya que deberían descender en el campo y colocarse más cerca de la gestación del juego y  no tan inclinados hacía la portería rival.

Reinaldo Rueda y la dura tarea de lograr resultados.

Probablemente veamos un equipo muy similar al que hemos visto los últimos años en el combinado chileno, ya que a pesar del paso del tiempo, el legado de Marcelo Bielsa sigue en el aire y ha marcado a una generación, la cual le terminó por dar la razón al Loco. Sin embargo, el recambio es necesario e imprescindible, dado que a pesar de dejar de lado a algunos nombres, otros deben ser reemplazados o sustituidos. ¿El sueño? Un tricampeonato, algo que claramente sería histórico.

Vidal-Alexis, las figuras

Seguramente, si observan con atención la lista que presentó Rueda, hay dos nombres que sobresalen. Uno en parte por su presente y otro más que nada por su historia. El primero es Arturo Vidal, quien viene de tener una temporada regular con el Barcelona, aunque, al igual que su equipo, no terminó por ser de lo mejor. La irregularidad fue un sinónimo para los culés, más allá del título de liga. Arturito estuvo inmerso en la misma sintonía que su equipo y probablemente no llegue de la mejor manera por esa cuestión.

Sánchez-Vidal, dos históricos, dos figuras.

Del otro lado, aparece Alexis Sánchez, uno que supo ser el faro del ataque pero que hoy en día es una incógnita. Su temporada con el Manchester United es mejor borrarla del disco rígido, ya que no pudo cumplir con las expectativas en una institución que tuvo más malas que buenas. En la liga tan solo jugó 20 partidos, nueve como titular, y marcó un gol. Ojo, el fútbol no vive de los números, pero a veces marcan cómo fueron las cosas. Igualmente, es imposible dudar de la calidad del ex jugador del Arsenal. Su talento es innato y puede desnivelar cualquier defensa.

La baja más sensible en la nómina es la del arquero Claudio Bravo, un histórico que mirara el certamen por televisión tras llegar lesionado al final de la temporada con el Manchester City. Mientras, si hacemos una especie de ránking, en el segundo lugar aparece Marcelo Díaz. El Chelo se consagró campeón con Racing en Argentina, pero no fue tenido en cuenta por el entrenador. Un péndulo en la mitad de la cancha que sin dudas se hará extrañar.

Un jugador al que hay que seguir de cerca es Erik Pulgar, un volante que tranquilamente puede suplir la falta del antes mencionado Díaz, y que ha tenido una buena temporada en el Bologna de Italia. A tal punto fue bueno su nivel que los tanos le subieron su cláusula y ahora el club que quiera llevárselo deberá sacar de su billetera 12 millones de euros.

Erik Pulgar, uno de los jugadores a seguir.

Chile llega con la esperanza de alcanzar el tricampeonato, algo que sería mucho más que histórico, pero que a priori parece una utopía. Tiene material para estimular los sueños de sus hinchas y, si observamos con detalle los grupos de la Copa América, seguramente más de uno coincidirá en que la zona C es la más pareja, ya que enfrentará a Ecuador, Japón y Uruguay. ¿Podrá mantener el nivel de las ediciones anteriores? ¿Rueda eligió bien su plantel? ¿Alexis volverá a ser la figura? Muchas preguntas, las cuales hemos tratado de develar, aunque la verdad se sabrá al finalizar el certamen.