Para ningún delantero es fácil ser suplente en un grande de Europa, y mucho menos sencillo es tener que demostrar su valía en los pocos minutos en los que ingresa al campo de juego. Si le agregamos el aliciente de que el punta titular es nada más ni nada menos que Luis Suárez, con todo el peso que el uruguayo conlleva, la dificultad del trabajo se incrementa.

Por dichas razones, el paso de Paco Alcácer por el Barcelona no funcionó del todo. El ex Valencia disputó 50 partidos y convirtió 15 goles con la camiseta blaugrana, aunque la mayoría de sus minutos los consiguió entrando desde el banco de suplentes: arrancó como titular en 22 de esos 50 encuentros, mientras que tuvo que esperar su oportunidad en los 28 restantes (un poco más de la mitad del total).

Con un Suárez imposible de sentar, las apariciones dentro del campo de juego, para Alcácer, fueron mínimas. De hecho, su mejor nivel y en el momento que más le pudo aportar al equipo fue cuando no jugó en su posición de delantero centro, sino en partidos en los que Ernesto Valverde lo colocó como una especie de extremo, para retroceder, y en ataque después tirar la diagonal al área.

Lucien Favre formó un equipo que recuerda al de Klopp

No obstante, el actual futbolista del Borussia Dortmund parece haber recuperado la alegría. Para esta temporada, es decir la 2018/2019, el ariete decidió que, tras tres años en Catalunya, la mejor decisión era marcharse. Finalmente se unió al club alemán y, unos meses después, podría decirse que su decisión empieza a verse como un acierto.

En el BVB, Alcácer comenzó a mostrar un buen rendimiento rápidamente. Y, curiosamente, metió varios goles en los partidos en los que entró desde el banco de suplentes. Después de ocho juegos, seis en la Bundesliga y dos en la Champions League, el español convirtió nueve tantos: ocho de ellos fueron en la liga nacional, mientras que el restante se dio en la competición europea.

Lucien Favre se transformó en el nuevo entrenador del Dortmund en julio de 2018. El entrenador francés armó un equipo que recuerda al que ideó Jürgen Klopp años atrás. Mucho pressing y, sobre todo, mucha velocidad en transiciones para correr, tocar rápido, y castigar al contraataque. La juventud del plantel, además, le da ese plus de energía que los hace tan intimidantes en el momento que encuentran un espacio para dañar al rival.

Alcácer, un delantero de rupturas y también de definiciones a un toque, se benefició de la gran cantidad de oportunidades de gol que su equipo continuamente genera. Por esto mismo es que pudo lograr un hattrick, en tan solo 30 minutos de juego, durante la victoria por 4-3 frente al Augsburgo. O un doblete, en 27 minutos, cuando le ganaron al Bayer Leverkusen 4-2.

El que también está en un nivel excelso es Marco Reus. Y no es casualidad que haya logrado recuperar un alto rendimiento con Favre, ya que fue el técnico que le dio un contexto favorable para que explotara, en sus inicios como futbolista, en el Borussia Mönchengladbach, Las lesiones acumuladas, lamentablemente, le cortaron todo tipo de crecimiento en su carrera. Ahora, sano, dejó de moverse por las bandas y se convirtió en un mediapunta que lidera todos los contraataques.

Marco Reus volvió al gran nivel que supo tener

Con Reus como la principal lanza en transiciones, en la banda se mueven dos extremos muy punzantes, sobre todo por el costado derecho con Jadon Sancho. El inglés, de 18 años, hasta hace un año formaba parte de la Academia del Manchester City, pero decidió marcharse para sumar minutos y proyectarse. Y en Dortmund encontró ese lugar en el que puede demostrar todas sus capacidades.

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Actualmente, el Dortmund está puntero en la Bundesliga con 27 unidades –ocho victorias y tres empates–, a cuatro puntos del segundo (Borussia Mönchengladbach), y a siete del tercero (Bayern Münich). Solamente transcurrieron cuatro meses del comienzo de la temporada, sin embargo por el juego demostrado da toda la sensación de que podrá pelear hasta el final la liga contra el gran equipo de Baviera. Necesitarán del olfato goleador de Alcácer para ello.