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Polonia y la confianza en la nueva generación dorada
Una de las selecciones que de un tiempo a esta parte despertó la atención del público europeo y mundial es Polonia, que con Robert Lewandowski como estandarte y gran figura pretende hacerse fuerte en territorio ruso y demostrar que vive uno de los mejores momentos de su historia.
Detrás del centrodelantero del Bayern Munich hay una estructura firme con un proyecto que desde 2013 encabeza Adam Nawalka, entrenador que potencio a jóvenes jugadores hasta llevarlos a un pico importante de madurez para apoyar a uno de los máximos goleadores europeos. El conjunto polaco tiene varios esquemas que el DT prefiere, dependiendo de la situación de partido. El 4-1-4-1 no renuncia a la línea de cuatro defensores que sale casi de manera instantánea.
Lucas Piscek, Kamil Glik, Michal Pazdan y Artur Jedrzejczyk forman parte de la defensa polaca. Los tres palos son bien custodiados por Lukasz Fabianski, solventado por la experiencia adquirida en sus años en el Arsenal y en el fútbol ingles. Incluso, cuenta con un buen recambio en la valla, Wojciech Szczesny .
Además de la línea de cuatro defensores atrás, se destacan las opciones que ofrecen jugadores como Bartosz Salomon, Thiago Cionek y Maciej Rybus, suplantando como lateral volante en varias ocasiones a Kuba Błaszczykowski, otra de las grande figuras polacas.
En la línea media, el centro de la cancha lo lidera Grzegorz Krychowiak como una de las principales salidas de pelota limpia, además de sumarse al juego asociado que producen los jugadores de tres cuartos de cancha en adelante.Pero las variantes de Polonia también aparecen en la mitad del campo porque Karol Linetty y Krzysztof Maczynski pueden ocupar el lugar del volante de recuperación o bien jugar los dos compartiendo equipo ante la ausencia de Krychowiak .
En tres cuartos de cancha es donde el conjunto de Nawalka alinea a sus jugadores mas desequilibrantes. Błaszczykowski, Piotr Zielinski, Kamil Grosicki, Bartosz Kapustka y Arkadiusz Milik son los que apuntalan al terrible goleador, de uno de los mejores centrodelanteros del mundo, como lo es Robert Lewandowski.
El esquema que utilizó Nawalka en la mayoría de estas eliminatorias europeas fue el ya mencionado 4-1-4-1 con Krychowiak como creador de juego, siendo un volante de corte y salida limpia, más los aportes en la marca de Błaszczykowski y Grosicki, la tarea como segunda punta de Zielinski y el ataque que aporta Piszczek por la banda derecha.
Los extremos por derecha y por izquierda se destacan por su potencia y por la capacidad de asistir a Lewandowski, quien se coronó goleador de las eliminatorias con 19 tantos, siendo pieza fundamental y capitán.
Además, el DT polaco ha optado por utilizar el sistema 4-2-3-1 con dos pivotes de corte en la mitad y tres medias punta delante de ellos, con su goleador como punta de lanza. Estos dos dibujos son los que más resultados favorables le ofrecieron a Polonia, cayendo solo frente a Dinamarca en todo el proceso clasificatorio y logrando ubicar a su Selección entre los cabezas de serie en el sorteo mundialista.
La primera época de oro de Polonia
Luego del período de entreguerras, Polonia decidió volver a formarse como federación y hacer fuerte su seleccionado nacional. El mejor momento de aquella Polonia llegó en los Juegos Olimpicos de Múnich en 1972, cuando se quedaron con la medalla de oro, en un proceso que en 1970 comenzó el DT Kazimierz Gorski y que llevó a los polacos a quedarse con la medalla de plata en 1976. Igualmente, el gran golpe lo dieron en los mundiales de 1974 y 1982, ubicándose en el tercer puesto en las dos ocasiones.
De aquella etapa dorada, se destaca la gran capacidad de armado de juego y la cuota goleadora que podía aportar Kazimierz Deyna, fundamental para la obtención del oro olímpico frente a Hungría en Munich 1972, siendo el goleador del equipo con 8 tantos, convirtiendo dos de ellos en la final. Deyna era el conductor de aquel equipo, el nexo entre volantes y delanteros, sumado a lo que empezaba a demostrar Grzegorz Lato, quien se transformaría años después en un goleador implacable, pero que en aquellos Juegos alternaba entre la titularidad y el banco.
En 1974, en el Mundial de Alemania, Polonia ratificó lo bueno que había logrado dos años antes, logró el tercer puesto, significando su mejor tarea en Copas del Mundo y luciendo a Lato como uno de los mejores jugadores de la competición. Lato se destacó como el goleador con 7 tantos, por encima de Johan Neskeens, Gerd Müller y Johnny Rep. Ganó su grupo con tres triunfos y, en la segunda ronda, solo cayó con Alemania Federal. Derrotó a Brasil en el partido por la tercera colocación.
LOS SIETE GOLES DE LATO EN ALEMANIA 1974
En los Juegos Olimpicos de Montreal en 1976, los polacos lograron sostener su gran presente. Se quedaron con la medalla de plata luego de caer frente a Alemania Federal en la final, ya con un Lato preponderante, no solo como goleador sino como el dueño del conjunto, apoyando el buen momento que durante la competencia tuvo Andrej Szarmanch.
Luego del quinto puesto en el Mundial de 1978, Polonia accedió en España 1982 su último gran logro dentro del fútbol de selecciones. Ya sin Deyna en su plantel, pero con un Lato en el pico de su madurez, encontró en Zbigniew Boniek al goleador necesario que le hacía falta.
Luego de una primera ronda complicada, con empates frente a Camerún e Italia y una goleada por 5-1 frente a Perú, Polonia llegó a la segunda ronda mejor armado, compacto y apoyado en la individualidad de Lato y la aparición de Boniek como goleador, incluyendo un triplete frente a Bélgica. Cayó en semifinales frente a Italia , que sería campeón, y derrotó a Francia en el partido consuelo por 3-2.
Desde el Mundial ‘82 hasta la actualidad, Polonia no logró grandes resultados, más allá de haber participado en Mundiales y fases definitiva de Eurocopa y lograr organizar la misma en su país junto a Ucrania. Ahora, la expectativa en Rusia está depositada alrededor de Lewandoski, un equipo compacto y construido como proyecto hace cinco años.
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