Copas europeas
Previa de la Final de Champions 2018-2019
Dos escuadras de Inglaterra, distintas en las formas pero que han sido igualmente efectivas en una Champions League que nos regaló emociones, remontadas épicas y héroes inesperados. Este sábado, Tottenham y Liverpool definirán al campeón de Europa, que será inglés tras la hegemonía merengue de los últimos años. En Cultura Redonda no quisimos quedarnos fuera y traemos para ustedes la previa de la final. Repasaremos los parados tácticos de ambos equipos y un comparativo entre sus entrenadores, sus figuras y las revelaciones de uno y otro en su camino hacia la final de Madrid. Pasen y miren, que el partido decisivo apronta su función estelar.
El Parado Táctico
Un Tottenham camaleónico observamos en esta Champions. Nunca se casó con un único esquema, ya sea por lectura de rival o por las ausencias que tenía el equipo. Varió por el 4-2-3-1, con Harry Kane de punta y tanto Son Heung-min como Eriksen en los costados, el 4-3-1-2 con mediocampistas más físicos como Wanyama o Sissoko, el arriesgado 3-1-4-2 con Lucas Moura y Fernando Llorente como puntas o el 4-4-2 con un mediocampo de rombo. La principal virtud de los Spurs fue la pegada brutal que tuvieron en el mata-mata, no importando el esquema. Incluso, fueron superados en el volumen de juego en gran parte de las series, sin embargo tuvo ese extra que nunca sobra.
En Liverpool, por el contrario, encontramos señas de identidad más definidas. Los Reds tienen tan dominado el 4-3-3, y el tridente formado por Sadio Mané, Mohamed Salah y Roberto Firmino tan aceitado, que es difícil imaginarlos jugando de otra forma. Algunas ausencias alterarían el once inicial a lo largo de la competición, pero no el parado táctico. Un cinco nominal y un par de interiores no desprovistos de capacidades defensivas, laterales profundos y un par de centrales para achicar la cancha le daban funcionalidad a la escuadra, que sumó un par de manos seguras en la persona de Alisson para esta temporada.
Los Entrenadores
Mauricio Pochettino arrancó su carrera como entrenador con el Espanyol de Barcelona en 2009. Las buenas temporadas con los periquitos lo llevaron a la Premier League para hacerse cargo del Southampton, de donde pegó el salto a un elenco más importante como el Tottenham, club en el que transita su quinta temporada. Pese a que no ha levantado títulos, sí que ha dotado de estabilidad a los Spurs y los ha situado como un equipo protagonista. Un técnico pragmático que muestra su capacidad de conducción y que sabe sacar lo mejor de cada jugador de su plantel el cual, hay que decir, no se reforzó durante los últimos mercados de fichajes y sin embargo mantuvo el protagonismo.
Su contraparte, Jürgen Klopp, inició muy joven su carrera como entrenador en su país natal dirigiendo al Mainz 05, al que llevó por primera vez a Bundesliga y del cual estuvo al frente durante 8 años, para después pasar a un grande del fútbol alemán: Borussia Dortmund. Con los borussers empezó a conseguir campeonatos (dos Bundesliga, dos Supercopas y una Copa de Alemania), pero además estableció un juego vertiginoso, ofensivo y efectivo en el equipo aurinegro. Los elogios llegaron, se convirtió en un técnico llamativo lo que lo llevó a Anfield, tras ocho temporadas con el BVB. El estilo de Klopp encajó perfecto en Liverpool, al que devolvió el protagonismo de otros tiempos.
Artículo relacionado: Pochettino, insatisfecho por naturaleza
Las figuras
Harry Kane es la cara más visible y el jugador franquicia (si cabe el término) para el Tottenham. Con 25 años y ocho temporadas en el club, no sólo es el capitán, sino el hombre sobre quien gira la ofensiva. En esos ocho años, Kane ha participado en 248 partidos y lleva convertidos 164 goles, con 27 asistencias. Su lesión de tobillo en el partido de cuartos de final de ida, ante el Manchester City, puso en vilo a su afición, y desde esa fecha no pudo participar con su escuadra. Parece que estará de vuelta para la final. ¿Qué versión de Hurrikane veremos en Madrid?
Mohamed Salah funge como la figura rutilante del Liverpool, pese a que en esta temporada estuvo un peldaño por debajo en cuanto a goles marcados. Sigue siendo la referencia de ataque en el explosivo tridente. Arrancó en el Al-Mokawloon Al-Arab de su país, llegaría al fútbol europeo al Basilea suizo donde prometía, pasó al Chelsea y no destacó, despúes a la Fiorentina con un paso discreto. Su arribo a la Roma marcaría un despegue definitivo, que se acentuaría en el Liverpool hasta catapultarlo como figura mundial; sus números con el Liverpool son bestiales: 102 partidos, 70 goles y 29 asistencias. En dos años como red, disputará su segunda final de Champions, su revancha llegó rápido.
Artículo relacionado: Mohamed Salah, la ilusión de un pueblo
Las revelaciones
Héroes inesperados de sus respectivos conjuntos, Lucas Moura y Divock Origi tienen carreras similares. Ambos actores secundarios, los dos con condiciones pero incapaces de asumir un papel preponderante. Este año, la Champions les dio su noche mágica. El brasileño y ese hat-trick in extremis para eliminar al Ajax de forma impensada. Y el belga con un doblete lleno de potrero para tumbar al Barcelona y depositar al Liverpool en la final. La Copa de Europa tiene eso, esa magia. Y todos esperamos verla en la final que disputarán dos ingleses, los creadores de este juego, en el país que gestó la última revolución de este deporte.
Artículos relacionados:
Relacionado
- AUTOR
- Abda Barroso
Comentarios