Sería muy difícil encontar un neutral que no asegure que el Ajax de Ámsterdam es el equipo más grande de Holanda. Los números, claramente, avalarían esta posición. En el plano local es el máximo ganador de la Eredivisie con 25 títulos, es el que más veces ganó la Copa de los Paises Bajos, con 18 estrellas, y es además es el club con más títulos internacionales con 10 obtenciones, entre ellas cuatro Copas de Campeones y dos lauros Intercontinentales.

Pero desde hace cuatro temporadas encontró un rival que lo logró destronar, el  Philips Sport Vereniging de Eindhoven, más conocido simplemente como PSV. Claro, no es un club nuevo, ni una sorpresa, de hecho en la década del ’80 y a principio de los 2000 supo ser tetracampeón de la Eredivisie.

Este domingo el PSV, de la mano de dos latinoamericanos, volvió a imponerse al Ajax con autoridad. Como lo había hecho en abril de este mismo año, en la que había sido la última derrota del Ajax en el certamen local. Aquel fue un partido en el cual el PSV sacó ventajas definitivas para, a la postre, quedarse con su título número 21, relegando al gigante de la capital.

Remarcamos que el triunfo llegó de la mano de dos latinoamericanos, porque el uruguayo Gastón Pereiro abrió el marcador y el mexicano Hirving Lozano (seguido de cerca nada más y nada menos que por el Barcelona) lo cerró con el 3-0 definitivo. Todos los goles fueron en el primer tiempo, y si bien Ajax pudo haber descontado, el triunfo de «Los Granjeros» nunca estuvo en peligro.

Es muy difícil imaginarse un campeón de la Liga de Holanda que no sea Ajax, PSV o Feyenoord, y si bien recién se llevan jugadas seis fechas de las 36 que componen el certamen, PSV ya sacó cinco puntos de ventaja a ambos clubes, habiendo vencido ya al Ajax y completando una racha de seis triunfos en fila con 24 goles a favor y sólo tres en contra. Las ultimas tres presentaciones, incluyendo el 3-0 de este domingo, fueron goleadas muy abultadas, con el 7-0 sobre Den Haag y 6-1 ante Willem II.

Sería muy apresurado vaticinar un nuevo título del PSV, pero sí podemos afirmar que el Ajax tiene una piedra en el zapato desde hace cuatro temporadas.