Copas
Relatos de Champions
Larga es la espera y mayor la ansiedad cuando se aguarda por un sorteo. Las 16 bolas son movidas y removidas por distintas figuras del mundo del fútbol. Los cruces se realizan y definen tan rápidamente que casi no nos da tiempo de preparar una hoja y el lápiz (con estrellas de la Champions League) para anotar con gran esmero y prolijidad los distintos emparejamientos que quedarán, hasta febrero, pegados en la heladera, debajo del teléfono de nuestra pizzería favorita. Grandes e históricos choques, revelaciones que sueñan con dar un pasito más y eliminatorias que a priori tienen un favorito sempiterno pero con los que, en dos meses, las casas de apuestas y los porcentajes pueden verse ridiculizados por este deporte que al final de cuentas es un juego y en él, todo puede ocurrir.
Borussia Dortmund-Benfica
Un joven nacido en Le Blanc-Mesnil, un suburbio al norte de París donde se crió y donde comenzó a dar sus primeros toques con el balón, con una calidad innata y muy superior a la de sus dos hermanos. Hijo de emigrante e hincha del mismo club que su padre -ex defensa central portugués-, Raphael inició su carrera en el filial del Caen tras ser observado por unos ojeadores del equipo en aquel entonces de segunda división. De madre francesa, no dudó en escoger a Portugal para representar al país luso sin la influencia de ningún familiar, por decisión propia y sin hablar apenas palabras del idioma paterno. Tras reconocer su sueño de jugar en el Real Madrid y compartir equipo con su jugador favorito (Cristiano Ronaldo), a Raphael Guerreiro se le presenta una situación compleja ya que se enfrentará con su club alemán al contrincante del cual es seguidor, el Benfica. Pisará el terreno de juego de su cuadro favorito y será visitante en «casa de papá». Guerreiro padre, quien tuvo que hacer las maletas de su Portugal natal a Francia como muchos otros compatriotas, tendrá en febrero el corazón dividido entre el equipo de su tierra y el de su hijo.
Barcelona-Paris Saint Germain
Un duelo que se ha repetido en reiteradas ocasiones en las últimas ediciones de la Champions League (dos en la 12/13 y cuatro en la 14/15), pero que guarda un grato recuerdo para los barcelonistas en forma de final y título. Tras triunfar en tres de los seis partidos, cediendo solo una derrota en fase de grupos y dos empates, el Barcelona se ha transformado en un rival temible (eliminó al PSG en dos oportunidades) para los parisinos que, para más inri, tienen a un Unai Emery que solo fue capaz de vencer en una ocasión -sin Lionel Messi- a los culés en 23 partidos con Almería, Valencia, Spartak de Moscú y Sevilla. La bestia negra del PSG y de Emery espera continuar con la estadística. El dato de color es la finalísima de la Recopa de Europa en 1997 donde los blaugrana, de la mano de Bobby Robson y con el actual entrenador Luis Enrique Martínez dentro de la cancha, vencieron por la mínima en Rotterdam con un tanto de Ronaldo de penal tras ser derribado en el área por Bruno N’Gotty luego de asistencia del técnico asturiano.
Napoli-Real Madrid
Octavos de final de la máxima competición europea pero en 1987. El mejor jugador del mundo visitaba un gélido Santiago Bernabéu tras la sanción impuesta por la UEFA debido al lanzamiento de objetos al meta Jean-Marie Pfaff en las semifinales de la temporada anterior ante el Bayern Múnich. Diego Armando Maradona fue anulado de forma excelsa tras el gran marcaje de Miguel Porlán «Chendo» Noguera en el partido de ida donde los blancos se impusieron 2-0. No obstante, el lateral derecho no solo ejecutó a la perfección su tarea y el mejor encuentro de su carrera sino que a mayores se dio el lujo de hacer un caño al que es reconocido para muchos el mejor futbolista de la historia. La vuelta en San Paolo fue 1-1 y el Madrid pasó a la siguiente ronda.
Arsenal-Bayern Múnich
Tres campeones del mundo con Alemania intentarán eliminar al campeón teutón. Shkodran Mustafi, Mesut Ozil y Pep Mertesacker forman parte del Arsenal de Arsene Wenger. Mientras tanto, los muniqueses no poseen ningún inglés en su plantilla, situación preocupante para los equipos de la Premier League que no exportan ni aplican una política de cantera para su día a día doméstico. El Arsenal, sin ir más lejos, presenta en su once habitual la misma cantidad de germanos e ingleses. De hecho, post recuperación del central Mertesacker, los alemanes serán mayoría.
Si analizamos las 16 formaciones frecuentes de los clasificados a octavos de final, la cifra para los británicos es muy preocupante. Solo los londinenses (Theo Walcott y Alex Oxlade Chamberlain), Leicester City (Wes Morgan, Danny, Simpson, Danny Drinkwater, Andy King, Marc Albrighton y Jamie Vardy) y Manchester City (John Stones) cuentan con jugadores ingleses de nacimiento entre sus filas y, para colmo de males, también son los únicos clubes con jugadores de este país en todo el plantel. Raheem Sterling (Manchester City) y Alex Iwobi (Arsenal), nacidos en Jamaica y Nigeria respectivamente, representan a Inglaterra tras obtener la doble nacionalidad.
Lo antagónico sucede con los últimos ganadores del Mundial de Brasil, donde el reparto de futbolistas por la competición es grandilocuente. A los anteriormente mencionados en el Arsenal se suman en el Bayern Múnich (Manuel Neuer, Mats Hummels, Jérome Boateng, Philipp Lahm, Joshua Kimmich y Thomas Muller), Juventus (Sami Khedira), Real Madrid (Toni Kroos), Barcelona (Marc-André ter Stegen), Borussia Dortmund (Julian Weigl, Mario Gotze, Marco Reus y André Schurrle), Leicester City (Ron Robert Zieler y Robert Huth), Manchester City (Ilkay Gundogan y Leroy Sané) y Bayer Leverkusen (Bernd Leno, Jonathan Tah, Benjamin Henrichs, Lars Bender, Julian Brandt y Stefan Kiessling). La diferencia es aplastante.
Mónaco-Manchester City
Tras disputar el primer Mundial de la historia de su Selección, el mediocentro de Costa de Marfil es traspasado del Olympiakos griego al Mónaco. Sin duda, un paso adelante en su carrera. En el Principado disputa 28 partidos y anota cinco dianas, siendo el jugador más regular e importante de un conjunto que no pasa de la mitad de tabla de Ligue 1. El nivel de Yaya Touré no pasó desapercibido en can Barça y fue fichado en el verano europeo de 2007 para ser entrenado por Frank Rijkaard. Tras un año con gran participación pero sin títulos en lo colectivo, el banquillo cambió de dueño y fue Josep Guardiola y Sala quien se hizo cargo. Con Pep obtiene en 24 meses los seis títulos naturales del año y revalida la liga pero Touré ve modificada su posición en algunos partidos debido a la promoción desde la cantera de un joven pero mágico Sergio Busquets.
Su representante Dimitri Seluk se reunió y cerró para la campaña 2010/11 con el Manchester City el traspaso por 30 millones de Euros, alegando que el africano no gozaba de minutos suficientes. Tras el arribo del marfileño a Manchester comenzaron los cruces de palabras donde el africano afirmó que «cada vez que le preguntaba algo a Guardiola me respondía cosas extrañas. Prácticamente me ignoró hasta que entró la oferta del City, por eso pese a llevar al club en el corazón, decidí irme». El entrenador culé comentó que «las puertas de mi despacho siempre estuvieron abiertas. La realidad es que él pidió a Laporta irse, y eso que le intenté convencer. Si nos cruzamos en Champions con el City ya hablaré con él».
Siete años pasaron desde aquellas declaraciones para finalmente volverse a encontrar. Pep anunciaba que dejaba el Bayern para iniciar un proyecto en el Manchester City. Pero las diferencias entre el técnico de Santpedor y Touré por culpa del polémico agente del jugador, retomaron su triste curso. Seluk espetó: «Espero que Guardiola tenga los huevos de decir que se ha equivocado humillando a un jugador de la categoría de Yaya Touré». Frase que obligó al catalán a responder con firmeza y sin titubeos; «Yaya no jugará hasta que su agente pida perdón», manifestó el DT. No obstante y tras alguna que otra frase desubicada del representante, el marfileño ha vuelto a las convocatorias y ha disputado minutos en este nuevo edificio que intenta construir Guardiola. Juntos pelearán e intentarán eliminar al club que fue un gran trampolín para Touré.
Atlético de Madrid-Bayer Leverkusen
Javier Hernández Balcázar, más conocido como «Chicharito», volverá a enfrentarse al elenco dirigido por Diego Pablo Simeone. Su último encuentro en la competición más importante del continente fue en la temporada 2014/15, eliminatoria que resolvió el mexicano a favor del Real Madrid con un tanto a falta de dos minutos para el final del segundo partido. En esa edición, el Atlético, antes de disputar el derbi de cuartos de final ante su vecino, derrotó en la tanda de penales al mismo rival de las aspirinas y en la misma instancia que en la que se verán las caras en febrero.
Estos dos conjuntos también poseen una estadística negativa ante el exclub del delantero de Guadalajara. El Leverkusen de Michael Ballack, Lucio, Dimitar Berbatov, Diego Placente y compañía cayó en la final del majestuoso gol de Zinedine Zidane en la 01/02, mientras que los colchoneros han tenido a los merengues como bestia negra en los últimos tres torneos. Los del Cholo perdieron en la última contienda en dos ocasiones (Lisboa 1-4 y Milán por penaltis) y en la eliminatoria que acabó 0-1 a favor del Real Madrid con el gol de Chicharito en cuartos de final.
Juventus-Porto
El puesto de portero ha evolucionado hacia un camino donde el guardameta participa con los pies de forma mucho más activa en el juego. Los Manuel Neuer, Marc André ter Stegen o Claudio Bravo son los casos más reconocidos. Pero además de esta evolución, también hallamos otro estereotipo de guardavallas, el arquero físicamente superlativo, con agilidad y gran dominio del juego aéreo, como Jan Oblak, Thibaut Courtois o Sergio Rico. En esta llave se van a cruzar dos compañeros de profesión que pertenecen a otra generación aunque que se mantienen (el italiano por encima del español) en la élite gracias a su constante adquisición de conocimientos. Dos metas que siempre se han manifestado su respeto y admiración, Gianluigi Buffon e Iker Casillas se volverán a ver las caras pero esta vez fuera de los focos, en un cruce de inferior envergadura; ya no disputarán los Italia-España o Juventus-Real Madrid. Casillas quiere demostrar al mundo que aún le queda una última bala para volver a ser, al menos una noche, «el santo». Aquel Iker imbatible de reflejos prodigiosos y salvadas milagrosas. Buffon, si bien ha tenido tres temporadas atrás una campaña irregular para lo que es su nivel que roza la perfección, a sus 38 años permanece entre los mejores de su posición y se conserva como el vino. Cada año que transcurre, se lo ve en mejor estado.
Leicester City-Sevilla
Claudio Ranieri continúa haciendo historia con su Leicester City. Tras conquistar de forma épica la pasada Premier League, en la campaña actual ha repetido la hazaña en Champions. De todos modos, los antecedentes tantos de los zorros como del técnico italiano ante españoles no son nada halagüeños.
La carrera del entrenador en el fútbol español se divide en tres etapas. La primera (1997-98) en el Valencia no coincide con el equipo andaluz ya que éste se hallaba en Segunda División. El segundo ciclo de Ranieri es en el Atlético de Madrid donde no acaba la temporada 99/00 y en el cotejo ante Sevilla es derrotado por 2-1. En esa campaña, el Atlético, desde marzo ya sin Ranieri, desciende junto al Sevilla. En su último periplo español, el romano ocupa por segunda vez el banquillo del Valencia pero con suerte dispar ya que su trabajo finaliza el 25 de febrero de 2005, tan solo siete meses en el cargo y un único juego ante Sevilla donde también es derrotado y como local por 1-2.
Leicester City participó en tres ocasiones de torneos continentales. En la Recopa de Europa 1961/62 cae a manos del Atlético de Madrid. En la Copa UEFA 1997/98 el enemigo español repitió victoria. Tres años más tarde, en la misma competición, el verdugo fue el Estrella Roja de Belgrado.
Sevilla intentará continuar con la mala racha del equipo inglés y del entrenador italiano ante rivales de la liga española. Ranieri y Leicester procurarán romper con las estadísticas y de la mano superar el duro escollo.
Bonus Track: Manchester United-Saint Étienne de UEFA Europa League
Los hermanos Boateng se enfrentaron en el Mundial de Sudáfrica en 2010. Kevin Prince para Ghana y Jérome para Alemania. En uno de los clásicos más importantes de Sudamérica, Diego Milito es ídolo de Racing y su hermano Gabriel amado en Independiente (recordado fue el paso del Inter con Diego a la final de Champions en casa del Barcelona de Gabriel). Lo mismo ocurrió en la última Eurocopa disputada en Francia donde los Xhaka se vieron las caras en Albania (con Taulant) y Suiza (con Granit); también en la Champions tras los Arsenal-Basilea.
Lukasz Cieslewicz manifestaba previo a un B36 Tórshavn de Islas Feroe y el The New Saint de Gales de su hermano Adrian: «Mamá ya ha dicho que no vendrá al estadio, porque no sabe a qué equipo apoyará». Otros casos fueron los de Thiago Alcántara y Rafinha en los Bayern Múnich-Barcelona de semifinales de Champions League 14/15 o los gemelos Degen que chocaron en un cotejo de Europa League entre el Young Boys suizo de David y el Stuttgart de Philipp. Vale destacar el duelo de los Riise también en la ex Copa UEFA, en el Roma de John Arne y el Fulham de Bjorn Helge. Pero quizás el menos recordado acaeció en la Supercopa de la UEFA de 1989 entre los Koeman donde jugaron el KV Mechelen de Erwin y el PSV de Ronald.
El caso en el que profundizaremos es el «Pogbattle», el cruce de Europa League entre el flamante refuerzo del Manchester United, Paul Pogba, y el Saint Éttiene del defensa Florentin. Uno es estrella en Francia y el otro internacional con Guinea. Cierto es que Florentin tiene el sueño de jugar en la Premier League como su hermano y ya algunos equipos como el Hull City o el Sunderland han mostrado interés en hacerse con sus servicios, aunque el zaguero reconoce que le encantaría jugar para el Arsenal. Mientras tanto, el entrenador portugués José Mourinho comentó al respecto: «Paul no paraba de reír después del sorteo y estoy seguro de que su hermano también lo estaba haciendo. Creo que es bonito que dos hermanos se enfrenten, algo que ya ha sucedido en el fútbol algunas veces». Este duelo fratricida nos retrotrae a algunas confesiones que realizó Florentin en FIFA.com hace un año. «Desde pequeños teníamos esa determinación de ser los mejores, fuese cual fuese el deporte, algo que nos enseñó a los tres (Mathias es el tercero en cuestión y juega actualmente en el Sparta de Rotterdam) nuestro padre que también jugaba cuando nos llevaba al parque a practicar pases, penales y faltas. Nuestra madre también fue jugadora pero ninguno de los dos fue profesional, algo que nosotros sí conseguimos, y eso es un orgullo tanto para nosotros como para ellos». Florentin y Mathias comparten vestuario en Guinea pero nunca pudieron hacerlo con Paul ya que «no hemos tenido la ocasión de jugar con él porque tiene tres años menos que nosotros. Nos habría encantado jugar junto a nuestro hermano pequeño, sería bonito que un día nos reuniésemos los tres, es nuestro sueño aunque sabemos que no será fácil».
A este hermoso enfrentamiento familiar se le añade un ingrediente histórico en la Recopa de Europa 1977/78, cuando el United se impuso al equipo francés en dieciséisavos de final. Ni el Manchester United se encuentra en su mejor momento deportivo tras la marcha de Sir Alex Ferguson ni el Saint-Étienne volvió a ser (tricampeón de liga entre 1974 y 1976) el que estuvo tan cerca de vencer en la final de Glasgow de Copa de Europa al Bayern Múnich el 12 de Mayo de 1976. En aquel once titular que cayó por la mínima con tanto de Franz Roth, formaba parte de la defensa el exentrenador exitoso con Vélez Sársfield, Osvaldo Piazza.
Historias que se cruzan y momentos que quedarán sin duda para el recuerdo. Diversos partidos de fútbol donde no solo debe quedar registrado el resultado, la investigación es parte de la historia y debe servir como herencia de los que analizarán estas eliminatorias dentro de cuatro o cinco décadas.
- AUTOR
- Nicolás Quiroga
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